miércoles, 11 de noviembre de 2009

15. Letras a un devenir.

Que el aire me respigue hasta Morir
cuando haya decidido que es hora de Caer.
Que el aire me respigue hasta Morir
cuando haya decidido que es hora de Dormir.




Si su beso me concede una Condena Dulce
tal vez vuelva a abrazarme con la Luz del Sol
y así la claridad apague el Miedo
a que el Barco me lleve sin ser su Pasajero;
a lamer el asfalto
y sentir en la columna los tacones
de aquellos que encontraron el acceso a la Escalera.

4 comentarios: